SGAE, Prostitución e impuestos.

En la factura de mi nuevo portátil, hay una anotación:: “Canon SGAE: 79€”. Unos genios estos de la SGAE. Sus ingresos caen porque no se venden CDs, y deciden que todos los españoles paguemos por cualquier cosa que pueda almacenar datos. Soy un pirata en potencia, así que tengo que pagar por ello. ¡A la mierda la presunción de inocencia!. Y por más que busco en su web, no encuentro el sitio donde reclamar mis derechos de autor (ya pagados) por cada CD que distribuyo con mis trabajos. Quizás tenga que poner una musiquita de fondo en los powerpoint cuyo autor sea jefecillo de la SGAE, declarar su uso y así empezar a recaudar como co-autor.

LA verdad es que el invento es bueno. En vez de perseguir a los infractores, se busca un sistema para que el resto de los mortales legales solucionen el problema. Parece increíble que un Estado (o 17, que no hay que ofender a nadie) acepte esta maniobra. Se castiga a toda la clase porque uno de los alumnos no hace los deberes, en este caso pirateando música por internet. Pero si nos fijamos, esto no es nada raro. Es un comportamiento habitual en la Autoridad Pública:

-En Madrid, se reunían las prostitutas en La Casa de Campo, creando grandes atascos en las horas punta puteras. La solución: cerrar el parque al tráfico rodado. Se evita que los clientes lleguen a las proveedoras. Si ahora quiero llegar al Zoo con mi familia, tengo que utilizar el “túnel de lavado” de la M30, convirtiendo un paseo de unos 5 minutos en otro cercano a los 20, suponiendo que no haya atasco, que es mucho suponer. ¡Y pasando por 7 radares de velocidad!.

-También en Madrid, se reunían los ecuatorianos en el Parque del Oeste, creando su botellón particular y jugando al volleyball con apuestas clandestinas. Pues se cierran sus accesos los fines de semana, y solucionado. Vamos, que entre las putas y los apostadores, el sábado me complican el llegar a casa.

Y ahora tenemos otro ejemplo a nivel nacional. Zapatero ha anunciado que para poder mantener los Servicios Sociales, va a aumentar la presión fiscal en todos los conceptos: IRPF, IVA, tasas, ect. Eso sí, lo va a hacer selectivamente para que solo afecte a las clases sociales más favorecidas. Aparte de la majadería (Señor presidente, TODOS los productos llevan IVA en un porcentaje, así que le está metiendo la subida tanto al que compra cigalas como al que compra leche), no he oído a nadie hablar de aumentar la persecución al fraude fiscal o a la corrupción política. Todos conocemos casos de trabajadores ilegales, de empresas que no pagan la Seguridad Social, de facturas sin IVA, de chanchullos en las compra-venta de casas, de muchos casos de malversación de fondos públicos, del reflorecimiento de las importaciones paralelas (¿Por qué creen que se ha hecho la campaña de Coca Cola “Compra productos de tu embotelladora local”?),. Si muchos de estos casos se solucionaran, no hay duda de que los ingresos del Estado (o de los 17) aumentarían, y bajarían sus gastos (También ayudaría cerrar 17 de las 18 Administraciones sanitarias, pero eso es otra historia) . Pero esto supondría perseguir a los infractores. Es mucho mejor seguir el sistema implantado por la SGAE. Pasemos la factura a los que ya pagan impuestos que protestaran algo pero no llegará la sangre al río. Fácil y seguro.

De esta manera, cuando me compre un nuevo ordenador, estaré financiando a Ramoncín, a la prostituta de la Casa de Campo , al corredor de apuestas ecuatoriano y la pensión del ex-alcalde de Pozuelo. Y me iré a casa contento porque he hecho mi buena acción del día. Es una verdadera suerte pertenecer a las clases sociales más favorecidas.